domingo, 3 de enero de 2010

El número 6 ó mi historia sobre ruedas

Un 6 de enero -contando yo con 6 años de edad- cogí mi primera burra; aún recuerdo ese doloroso proceso para aprender a mantener el equilibrio sin la ayuda de las patas laterales traseras. 6 años más tarde mis padres me obsequiaron una nueva bicla, la cuál me robaron cruelmente en una papelería por estar yo distraido jugando Mortal Kombat. Antes de este triste suceso solíamos salir toda mi familia a bicicletear a La Barranca, mucho antes de que este lugar se volviese el infame fraccionamiento de Cofradia con todo y su río seco y sus campos que ya no producen más alfalfa.

Finalmente mi padre le compró a mi abuelo una bici de carreras -de esas de rin delgado- con la cual un día visité 6 municipios del Establo de México -a saber, Tepotzotlan, Teoloyucan, Tlalnepantla, Atizapan de Zaragoza, Cuautitlan de Romero Rubio y Cuautitlan Izcalli- siguiendo como ruta toral la antigua carretera que conectaba al DF con Querétaro -ahora tenemos la Autopista.

Ahora vivo en París y durante 6 meses he utilizado el sistema Velib de renta de bichas -un euro por día usándolas por un periodo máximo consecutivo de 30 minutos- es bueno, pero restrictivo. Algo de lo que más extraño de México son mis paseos ciclistas matinales e irrestrictos al Lago de Guadalupe.

En resumen, me gusta andar en bici. ¡Gracias por seguirme medrano.rafael y bienvenido!
Ps: No se obsesionen con un número o cifra por que corres el riesgo de verla en todas partes (según el maestro de Max Cohen en la película de Aronofski Pi, el orden del caos). ¡Felices paseos ciclistas a todos!